Visítanos en Twitter Visítanos en Linkedin Visítanos en Facebook Visítanos en G+ Visítanos en Youtube

Las Organizaciones no Gubernamentales para el Desarrollo (ONGD) y las políticas económicas

Comunidad Las Victorias, El Salvador enero2010

Foto por: Mario Guevara

Cuando David Llistar es citado haciendo la pregunta: “¿Cómo explicar que tras sesenta años de cooperación internacional al desarrollo, el mundo de los empobrecidos, en su conjunto, no haya mejorado?” vale la pena detenerse a reflexionar al respecto. Hay algo que no está funcionando cuando no hay un beneficio significativo para los grupos sociales más vulnerables.

Es importante analizar si la cooperación proveniente de los países del Norte está realmente abonando al desarrollo de las sociedades o si, simplemente, está fungiendo como parte de una “cuota” previamente establecida y que, al mismo tiempo, permite postergar las pláticas sobre cómo la crisis ha aumentado el desempleo en su propia sociedad. Si ocurre esto último, por supuesto que la cooperación se ve prácticamente anulada ante otras prácticas voraces. ¿Creemos realmente que talleres de empoderamiento para mujeres productoras en zonas remotas tendrán la misma repercusión que políticas de mercado en donde prima el interés económico? Una compañía puede volcarse hacia los eco-combustibles y presentarse como una compañía “verde” ante el resto del mundo. Muy pocos se preguntarán cómo esto afectará a las familias campesinas. Solo algunos se darán cuenta de que el alza en los precios hará imposible que ellos sigan alimentándose como lo han hecho durante años. Esos son los costos ocultos del progreso no sostenible.

Por ello es que es de suma importancia estar en contacto con los grupos con los que se trabaja y analizar objetivamente qué se necesita para mejorar su nivel de vida. Además hay que promover la noción de que son ellos quienes deben hacerse oír y exigirle a sus gobernantes que las políticas estatales respondan a sus necesidades y luchas. Este es obviamente un camino largo y tortuoso. Esperar que las y los funcionarios dejen de lado su interés en una larga carrera política para atender las necesidades urgentes de la población tomará mucho tiempo. Por eso la cooperación sigue siendo importante y necesaria, pero no debemos perder la perspectiva de que debería ser finita y debería ir enfocándose en la incidencia si lo que busca son cambios a largo plazo.

 

Por: Mario Guevara, estudiante del Curso taller de Cooperación Internacinal y Elaboración de Proyectos. Ciiactua

email

Deja un comentario

Solve : *
16 − 1 =